El sistema de salud Irlandes sufre un ataque de ransomware al igual que otras muchas empresas públicas como el SEPE (Servicio de empleo público estatal) español.

Miles de citas médicas, tratamientos oncológicos y cirugías fueron canceladas debido a este ataque ocurrido el pasado viernes, esto es porque no solo afectó a pacientes médicos, sino también al público irlandes como comentó el primer ministro irlandés Michael Martin. A pesar de las dificultades, el servicio de ambulancias está operando con normalidad al igual que la gestión de la vacunación de COVID-19.

Este ataque no solo afectó al tratamiento de muchos pacientes, sino que también impactó severamente a los sueldos de los trabajadores del sector salud. 

El virus que atacó a esta institución es el mismo que atacó al gran oleoducto estadounidense, al SEPE o a Phone House entre otros, un Ransomware que bloquea las computadoras, codifica los datos y exige un pago de rescate para liberar los datos. Una vez pagado, los hackers proporcionan claves de descifrado de software.

En este caso se acusa a la banda Conti que exigen 20 millones de dólares. Las autoridades inglesas se niegan a pagar.

“Rechazamos este intento de chantaje”

ASEGURÓ LA MINISTRA DE JUSTICIA HEATHER HUMPHREYA.

No puede ser una coincidencia que cuatro años antes se produjera un ataque similar provocando serios problemas e interrupciones en el Servicio Nacional de Salud (NHS, en sus siglas en inglés) del Reino Unido. En ese entonces, el virus WannaCry fue el que obligó a paralizar la actividad de casi 600 centros de salud de todo el país.

A pesar de que las molestias provocadas a los pacientes no han sido por una mala gestión de la institución sino por ciberdelincuentes, el HSN se disculpó con los pacientes y aseguró que ofrecería más información a medida que estuviera disponible.